MENSAJES CLAVE

• Las lesiones causadas por los accidentes de tráfico son un grave problema de salud pública mundial. La rápida motorización de los países de ingresos bajos y medianos (PIMB), junto con la precaria calidad de la seguridad de los sistemas viarios y la falta de capacidad institucional para gestionar resultados, contribuyen a una creciente crisis.
• Cada año, mueren alrededor de 1,19 millones de personas en las carreteras de todo el mundo y cerca de 50 millones resultan heridas. Esto sucede principalmente en los PIMB, entre usuarios vulnerables, y afecta a los ciudadanos más activos socioeconómicamente.
• Las lesiones por accidentes de tráfico constituyen, a nivel mundial, la principal causa de muerte en niños y jóvenes de entre 15 y 29 años. Si no se toman medidas urgentes, se estima que, en 2030, las lesiones causadas por accidentes de tráfico serán la séptima causa principal de muerte en todo el mundo.
• En términos socioeconómicos, los países de todo el mundo están pagando un alto precio por la movilidad motorizada. Se estima que las muertes y lesiones por accidentes de tráfico en países de ingresos bajos y medianos causan pérdidas económicas de hasta el 5% del PIB, frente a una media mundial estimada del 3% del PIB.
• Se pueden prevenir las muertes y las lesiones graves provocadas por accidentes de tráfico si se gestiona la energía liberada en las colisiones para que no excedan las tolerancias del cuerpo humano y se produzcan lesiones graves y mortales, y esto se logra mediante una gestión de la seguridad vial eficaz, orientada a los resultados y con recursos suficientes.
• Los objetivos y estrategias del Sistema Seguro se centran en proporcionar un sistema viario libre de muertes y de lesiones graves.
• El Sistema Seguro guía la planificación, el diseño, la gestión, la explotación y el uso del sistema viario para proporcionar seguridad a pesar de la falibilidad humana. Impone una responsabilidad compartida a todos los elementos del sistema.
• La prevención de las lesiones en las infraestructuras viarias públicas y en los accidentes de tráfico laborales es una responsabilidad fundamental del gobierno, sus organismos y los empleadores, y requiere responsabilidad y liderazgo compartidos.
• La magnitud del reto de la seguridad vial y la diversidad de los efectos de las lesiones por accidentes de tráfico subrayan la importancia de explorar sinergias con otros objetivos y prioridades sociales.
• Se ha anunciado un segundo Decenio de Acción de las Naciones Unidas para la Seguridad Vial 2021-2030, con un ambicioso objetivo y plan mundial para reducir las muertes y lesiones graves por accidentes de tráfico en, al menos, un 50% para 2030.