7.2 INTERPRETACIÓN DE LAS FUNCIONES Y RESPONSABILIDADES DE UNA AUTORIDAD VIAL

LAS RESPONSABILIDADES REFLEJARÁN LA LEGISLACIÓN APLICABLE

La legislación y las normativas pertinentes prescribirán las funciones y responsabilidades de un organismo responsable de la red viaria en un país. Si bien la naturaleza y el alcance de estas varían de un país a otro, por lo general abarcarán la planificación y construcción de nuevos proyectos viales importantes, la seguridad vial, la gestión de activos, la gestión del tráfico, el mantenimiento de carreteras, la regulación del derecho de paso y el desarrollo colindante, en diversos grados.

La responsabilidad de establecer los límites de velocidad en todas las carreteras, o quizás solo en las carreteras nacionales o estatales, así como de emitir directrices sobre los límites de velocidad y las normas de diseño de las carreteras locales, probablemente recaiga en las autoridades viales nacionales o estatales. Por el contrario, es menos probable que esta sea la situación en los PIMB.

Como punto de partida, las obligaciones legales de un organismo responsable de la red viaria para el funcionamiento seguro de su red requerirán la implantación de sistemas y procedimientos de gestión de riesgos a fin de:

• Reconocer la seguridad vial como un objetivo clave en la gestión de la red viaria.
• Prever una inspección de seguridad vial periódica adecuada de la red viaria.
• Especificar las medidas que deben adoptarse cuando se detecten condiciones inseguras.

Por poner un ejemplo, las autoridades viales pueden tener el deber de identificar, evaluar y priorizar los riesgos, para luego tomar medidas razonables que los aborden. Esta obligación suele abarcar a todos los usuarios (incluidos peatones, ciclistas y dispositivos de movilidad emergentes), cubriendo así toda la reserva vial (es decir, incluyendo carreteras y arcenes).

Sin embargo, los países tendrán diferentes responsabilidades legislativas y reglamentarias que establecen requisitos de seguridad vial vinculantes para sus autoridades viales.

IMPACTO DE LA SEPARACIÓN DE RESPONSABILIDADES EN EL RENDIMIENTO DE LA SEGURIDAD VIAL

Un enfoque de seguridad vial prioritario para las autoridades viales debe incluir la seguridad de la infraestructura, el uso del suelo y el control de acceso desde las reservas de terreno colindantes con la carretera y el establecimiento de límites de velocidad. El enfoque del Sistema Seguro requiere que el organismo responsable de la red viaria tenga en cuenta todos los elementos que afectan a la seguridad vial en la red al desempeñar sus responsabilidades.

Esto puede complicarse en situaciones en las que las responsabilidades están divididas o separadas entre diferentes departamentos. Por ejemplo, el establecimiento de límites de velocidad, la planificación de la gestión del tráfico y la gestión de las operaciones de vehículos pesados pueden estar a cargo de departamentos distintos del organismo responsable de la red viaria (concretamente, el Departamento de Transporte o la Policía). En estos casos, existe el desafío de llegar a un acuerdo con otros departamentos sobre prácticas coherentes.

Debido a ello, se recomienda, siempre que sea posible, que estas responsabilidades formen parte del papel de un organismo responsable de la red viaria. Si esto no se puede lograr, el organismo responsable de la red viaria debe estar facultada para participar (con su consentimiento) en el establecimiento de directrices y normas que se aplicarán a estas responsabilidades.

Todas estas cuestiones están relacionadas con el funcionamiento y el uso seguro de la red. Estas características operativas son un factor determinante del nivel de riesgo de accidentes que se experimentan en la red. Por lo cual, será necesario un esfuerzo de coordinación considerablemente más activo de lo habitual para que los organismos y agencias logren resultados de seguridad vial eficaces en estas situaciones de “responsabilidad separada”.

EL APOYO NECESARIO DE OTRAS AUTORIDADES PARA LOGRAR UN CUMPLIMIENTO DE LOS USUARIOS

El organismo responsable de la red viaria tiene la obligación de apoyar el logro de:

• El nivel de comportamiento de los usuarios que se asumió en el diseño de las nuevas obras viales.
• El nivel de comportamiento requerido para lograr un funcionamiento seguro de la red existente.

Las autoridades viales deben trabajar con la policía local, los gobiernos provinciales y locales para explicar la importancia de sus funciones en el logro de un funcionamiento seguro de la red. Además, deben apoyar y fomentar la acción policial para lograr el cumplimiento de los límites de velocidad, pero también para el uso del cinturón de seguridad y el casco, la prioridad de los peatones en los cruces, los adelantamientos seguros, el respeto de los controles de tráfico en las intersecciones, la conducción segura de vehículos pesados y la reducción al mínimo de la conducción bajo los efectos del alcohol.

FACILITAR LOS PRINCIPALES ENFOQUES GENERALES

El Equipo de Políticas de Seguridad Vial: Dentro de un organismo responsable de la red viaria existe un grupo de profesionales responsables de iniciar el desarrollo de políticas y directrices de seguridad vial (normalmente un equipo o sección de ingeniería especializado en este campo) y de hacer recomendaciones pertinentes al grupo corporativo superior, que tiene una responsabilidad considerable. Este grupo debe estar preparado para presentar posiciones políticas que reduzcan el riesgo de accidentes en la red, reconociendo al mismo tiempo que esto afectará a los enfoques tradicionales.

El Equipo de Ingeniería de Seguridad Vial: Será necesario consultar y hacer partícipes a otras partes de la organización (mantenimiento, diseño, gestión de activos, gestión del tráfico) para que contribuyan al cambio de mentalidad necesario para obtener el apoyo corporativo para cambiar sus actividades. Se trata de una tarea importante —cambiar el enfoque tradicional adoptado para la construcción y el mantenimiento de las carreteras— para lograr la comprensión y la aceptación de la necesidad de reacondicionar las redes viarias para cambiar los perfiles de riesgo de accidentes a lo largo del tiempo. Por tanto, un equipo de ingeniería de seguridad vial dentro de una organismo responsable de la red viaria debe ser capaz de operar como un centro de experiencia para apoyar el despliegue de conocimientos y programas en todas las regiones y, según corresponda, dentro de las funciones de la oficina central.

Se necesitará experiencia para llevar a cabo una serie de funciones clave, entre ellas:

• Proporcionar asesoramiento estratégico al grupo de gestión corporativa para mejorar los resultados y llevar a cabo las acciones asignadas a la estrategia nacional de seguridad vial.
• Prestar apoyo a las regiones, por ejemplo, mediante cursos de formación, para aumentar progresivamente la comprensión y la aplicación del enfoque del Sistema Seguro y las herramientas relacionadas.
• Orientar la revisión y el desarrollo de normas, directrices y herramientas de evaluación del riesgo de accidentes (incluida la elaboración o mejora de un manual de auditoría de seguridad vial y directrices para programas de lugares de alto riesgo).
• Brindar asistencia y apoyo a las autoridades gubernamentales locales, según lo especificado en la legislación y lo indicado en los planes de acción nacionales de seguridad vial.
• Guiar en el desarrollo de políticas basadas en la experiencia y los comentarios de las oficinas regionales para su adopción por parte del grupo de gestión corporativa.
• Apoyar a las oficinas regionales para establecer y supervisar el acceso a los datos policiales de accidentes y otros datos relacionados con la seguridad vial, así como su uso de los datos locales para determinar las ubicaciones y longitudes de mayor riesgo de accidente, además de guiar la implementación de programas ampliados de tratamiento de seguridad vial.
• Promover una implementación gradual de auditorías de seguridad vial, al mismo tiempo, aplicar medidas para definir procesos de acreditación de auditores con una entidad profesional autónoma y determinar las exigencias de los cursos de formación.
• Obtener financiación y recursos para la formación de los programas regionales.
• Informar periódicamente al grupo de gestión corporativa sobre los progresos realizados en estas responsabilidades.

EL ROL IMPORTANTE DE APOYAR A LOS GOBIERNOS PROVINCIALES Y LOCALES

Los gobiernos locales necesitarán apoyo para introducir los principios del Sistema Seguro y también aportarán ideas sobre cómo los tratamientos de este sistema pueden aplicarse de manera más eficaz. La importancia del papel de los gobiernos locales queda ilustrada con el ejemplo de Indonesia, donde datos recientes sugieren que más del 70 % de los fallecidos en accidentes de tráfico se producen en carreteras, calles provinciales y locales, no en carreteras nacionales.

Asimismo, los gobiernos locales tienen responsabilidades de planificación del uso del suelo para controlar la naturaleza de los nuevos desarrollos, el acceso a las reservas de carreteras y la prevención de proyectos ilegales. A su vez, tienen responsabilidades de gestión de las carreteras para controlar los efectos inseguros que se produzcan allí. Estos poderes a menudo se extienden a las carreteras nacionales en los PIMB.

A menudo, el papel del gobierno local, por ejemplo, es proporcionar senderos que colinden con nuevas urbanizaciones o carreteras existentes. Es necesario tener en cuenta las cuestiones de seguridad de los peatones, así como la seguridad de los usuarios motorizados y los ciclistas. De igual manera, elaborar y adoptar políticas para la circulación segura de los peatones para posibles mejoras en lugares de mayor riesgo. En consecuencia, es necesario resolver los acuerdos de financiación para garantizar que se disponga de instalaciones peatonales.

Por último, serán necesarias herramientas sencillas de apoyo a la mejora de los conocimientos y de la capacidad a los niveles local y provincial y una financiación adecuada, a pesar de que los acuerdos de financiación sean habitualmente complejos y específicos para cada país.

OBTENER UNA FINANCIACIÓN ADECUADA

Es probable que, con el tiempo, la introducción de un Sistema Seguro conduzca a un cambio fundamental en el enfoque y los programas de una autoridad. Las intervenciones e inversiones rentables en materia de seguridad vial se convertirán en un componente más sustancial de los nuevos proyectos de las obras de mantenimiento y reconstrucción, los cuales también contribuirán a mejorar la gestión de la seguridad vial en las obras. En todos los PIMB, la comprensión y la identificación de los problemas de mayor riesgo de accidentes (por ejemplo, mediante la aplicación de programas proactivos de evaluación en la red y el análisis de lugares de alto riesgo) aumentará la demanda de implementación de tratamientos. Es así como cada vez serán más frecuentes las asignaciones de fondos para seguridad vial dentro de los presupuestos anuales con el fin de responder a estas demandas. Sin un compromiso financiero del gobierno (apoyado por propuestas de programas de seguridad vial innovadores por parte del organismo responsable de la red viaria), no habrá ningún cambio.

Un aumento de la financiación para proyectos de esta índole requerirá la vinculación a nuevos indicadores principales de rendimiento (KPI, por sus siglas en inglés), cuya medición permitirá gestionar la eficacia. El Cuadro 7.1 describe un método para obtener la financiación necesaria para las actuaciones relacionadas con el Sistema Seguro.

CUADRO 7.1: FINANCIACIÓN ASIGNADA E INTEGRADA PARA LA INGENIERÍA DE SEGURIDAD VIAL DE SISTEMAS SEGUROS – SUECIA

Obtención de fondos de seguridad vial de otras administraciones: todas las agencias, especialmente las autoridades sanitarias y de carreteras, deben buscar oportunidades para obtener financiación específica para inversiones en seguridad vial (por ejemplo, obras de seguridad en infraestructuras, medidas de control adicionales, campañas públicas, conferencias y seminarios), dado el coste relativamente elevado de la provisión de infraestructuras y las implicaciones de los accidentes en el sistema sanitario.

Cómo obtener financiación específica para la seguridad vial: obtener una financiación adecuada para la seguridad vial es una de las principales responsabilidades de un organismo responsable de la red viaria. En particular, es necesario recurrir a fuentes de financiación nacionales sostenibles en la medida de lo posible. Algunos ejemplos de posibles fuentes de ingresos que merecen especial atención son la introducción de mecanismos de aplicación más eficientes (aplicación automatizada) para el cobro de multas de tráfico y las contribuciones de las aseguradoras de accidentes, basados en la consecución de un porcentaje satisfactorio de rendimiento económico de la inversión a través de una menor siniestralidad. En algunos países como Australia, Canadá y Suecia, las aseguradoras de accidentes financian importantes programas de publicidad, investigación y aplicación de la ley, mientras que los ingresos procedentes de las infracciones de tráfico (Australia y Francia) financian importantes programas de infraestructuras.