6.5 PLANES DE ACCIÓN E INVERSIÓN
ESTRATEGIAS Y ACCIONES
Tanto las estrategias como las acciones son planes de inversión. Sin embargo, Beer et al. (2013) señalan que existe una diferencia considerable entre países en cuanto a lo que se incluye en un documento de estrategia y lo que se incluye en los planes de acción. Señala que un punto clave de diferencia es el nivel de detalle de las medidas específicas. Es decir, algunos incluyen más detalles dentro de la estrategia, otros dejan los detalles para los planes de acción, mientras que también los hay que proporcionan detalles para el período inicial de la estrategia (por ejemplo, los dos primeros años), pero confían en los planes de acción (revisados tal vez cada dos años) para proporcionar detalles para las etapas posteriores de la estrategia. No obstante, se concluye que no hay una respuesta sobre cuál es el mejor enfoque en este tema. Lo importante es que la estrategia debe permitir suficiente flexibilidad para abordar cualquier problema específico que surja a medida que se desarrolla la misma (por ejemplo, a la vista de nueva información sobre posibles grupos problemáticos), cambios en el entorno político (incluidos cambios en la financiación o las prioridades) o con la aparición de nuevas técnicas para hacer frente al riesgo. Por otro lado, el plan de acción debe proporcionar descripciones detalladas de lo que se logrará con cada acción, junto con un calendario, los costes y los beneficios esperados, incluyendo las siguientes características:
- Las acciones deben ser realistas (teniendo en cuenta las limitaciones financieras y de otro tipo).
- Las acciones deben seleccionarse en todas las áreas clave de la seguridad vial (programa equilibrado).
- Debe darse prioridad a las medidas que hayan demostrado ser rentables.
PLAZOS PARA ESTABLECER OBJETIVOS
Es necesario adoptar estrategias y acciones de inversión para apoyar la mejora del desempeño en materia de seguridad vial y el logro de los objetivos, tanto a corto plazo (de uno a tres años), como a medio plazo (de tres a diez años) y a largo plazo (más de diez años). Para los PIMB, la opción recomendada a corto plazo es el avance continuo mediante proyectos piloto, ya sea con o sin un objetivo aspiracional (nocional) a corto plazo.
Tanto para los PIMB como para los PIA, será esencial contar con planes y estrategias de inversión bien pensados para lograr los objetivos a medio plazo y, finalmente, avanzar hacia el objetivo final a largo plazo (véase el Capítulo 3. Sistema de gestión de la seguridad vial). De la misma forma, es importante comprender la relación entre las fases de inversión y los plazos estratégicos.

La fase de establecimiento (a corto plazo) de la planificación de inversiones en seguridad vial se centra en la creación de una capacidad básica que permita iniciar y aumentar un rendimiento eficaz y específico. Los principales objetivos de la actividad en esta fase deben ser:
- Establecer mecanismos de gestión y coordinación de la seguridad vial.
- Desarrollar una cultura de gestión del rendimiento.
Las tareas que deben realizarse en esta fase pueden incluir el desarrollo y la implementación de los sistemas de datos, las herramientas y las directrices necesarias, así como el fortalecimiento de la legislación con el fin de que esté lista a tiempo para apoyar las fases de implementación posteriores.
En la fase de inversión de crecimiento (a medio plazo), las principales prioridades son:
- Desarrollar un marco sólido de gestión del rendimiento para todos los organismos y agencias con programas específicos de seguridad vial.
- Implementar los cambios recomendados a partir de las revisiones de políticas realizadas en la fase de establecimiento.
- Una financiación adecuada.
En cuanto a la fase de inversión de consolidación (a largo plazo), las principales prioridades son:
- Garantizar que se ha establecido el marco de gestión del rendimiento en las regiones y distritos.
- Optimización de la eficiencia y efectividad en las operaciones y administración.
- Buscar oportunidades para futuras innovaciones en materia de seguridad.
PRINCIPIOS DE LOS PLANES DE ACCIÓN Y DE INVERSIÓN
Tal y como se ha mencionado anteriormente, los planes de acción y los planes de inversión pueden abordar diferentes plazos (a corto, medio y largo plazo). Sin embargo, es esencial definir claramente algunos aspectos, ya que son importantes para asegurar el éxito de los planes en cualquier plazo:
- Los objetivos deben estar vinculados a plazos definidos que deben alcanzarse.
- Debe garantizarse una financiación adecuada.
- Deben definirse las responsabilidades.
- Debe aplicarse un proceso de toma de decisiones eficaz, estableciéndose mecanismos de consulta para apoyar la aplicación de las medidas.
El reto en los PIMB es lograr las condiciones previas necesarias para obtener los resultados previstos. Esto suele requerir años de esfuerzo sostenido. La mejora de la seguridad vial es un proceso continuo que requiere un compromiso constante.